Un informe oficial que responsabilizó a la estrella de los Marlins José Fernández del accidente de bote que acabó con su vida y la de sus dos acompañantes podría convertirse en un respaldo para las demandas que persiguen una compensación por estas muertes, consideraron expertos legales.
Las familias de Emilio Macías, de 27 años, y Eduardo Rivero, de 25, buscan por separado una compensación de 2 millones de dólares por la muerte de sus seres queridos, un monto que supera el valor de los activos dejado por el pelotero.
El abogado de las familias de Macías y Rivero dijo en un comunicado que espera que el resultado de la investigación aliente a las partes a alcanzar un acuerdo "amigable" fuera de los tribunales.
"Si bien se determinó la responsabilidad de forma oficial, las familias de Emilio y Eduardo no son vengativas y esperan que se logre alcanzar un acuerdo amigable en esta demanda lo más rápido posible para no prolongar el cierre final para las personas que resultaron afectadas", dijo el abogado de Fort Lauderdale Christopher Royer.
"Las familias Rivero y Macías también perdieron a sus hijos en el mejor momento de sus vidas. Pase lo que pase, no hay ganadores en esto, solo pérdidas, las vidas de esos tres buenos jóvenes", agregó.
Sin embargo, un abogado de la familia Fernández dijo estar insatisfecho con los resultados de la investigación y que no tiene planes de pactar en este punto las demandas que persiguen una compensación económica por la muerte de Macías y Rivero.
"Es obviamente muy decepcionante y la familia está devastada", dijo Ralph Fernández, el abogado de la familia del pelotero. El jurista difiere con los hallazgos argumentando que los expertos que él ha consultado no han podido determinar de forma contundente, con base en la evidencia existente, quién iba manejando el bote. La evidencia, según el abogado, quedó potencialmente contaminada durante el traslado de la embarcación del muelle al lugar donde fue inspeccionada por los investigadores.
El informe oficial fue revelado este jueves, un día después de que un juez del condado Miami-Dade concedió una petición para que la herencia de Fernández, que fluctuaría entre los 2 millones y 3 millones de dólares, sea administrada conjuntamente por su madre y novia, quien recientemente dio a luz.
Las familias de Macías y Rivero esgrimen que la "negligencia" de Fernández ocasionó las muertes. Argumentan que Fernández falló en cumplir con los estatutos de Florida "mientras estaba intoxicado y/o bajo la influencia de una sustancia ilegal". Macías y Rivero eran los únicos dos pasajeros en el bote Kaught Looking, propiedad del pitcher, que era un ávido pescador.
Opciones legales
Dos abogados independientes consultados por Univision Noticias concordaron en que el informe del FWC es sumamente dañido para la familia de Fernández. Pero aún tiene varias opciones, incluyendo la de que el caso sea transferido de una corte estatal a un tribunal marítimo que se encarga de los casos ocurrido en el mar.
"Este es un informe formidable para cualquier abogado que vaya contra la herencia. El investigador se lo puso en bandeja de plata", consideró David Weinstein, un exfiscal federal y estatal que actualmente practica en la firma privada Clarke Silvergate.
Los casos en las cortes marítimas no contemplan un jurado y tienden a resolverse por montos compensatorios menores a los de un tribunal estatal, donde los jurados pueden imponer daños punitivos por angustias mentales y pérdidas de los ingresos profesionales. Macías y Rivero no eran pudientes, pero ambos estaban empleados y tenían por delante una potencial carrera exitosa. Macías eran banquero en Wells Fargo y Rivero era representante de ventas de Carnival Cruise Lines. Ambos eran solteros, lo que limita los potenciales daños para parejas e hijos.
"Ambas partes pedirán números. Es un camino largo", dijo James Perry, abogado marítimo en el bufete Perry & Neblett en Miami. Si bien el informe de FWC responsabiliza a Fernández, eso no significa que Macías y Rivero fueron "simplemente unas víctimas inocentes", agregó Perry.
El hecho de que ambos eran mayores que Fernández y que decidieron montarse en el bote a pesar de concocer que había involucrados los factores alcohol y cocaína podría limitar los daños estipulados por el juez. "La corte se fijará en el alcohol, las edades, en todo eso", dijo Perry.
La investigación de FWC mostró que Macías compró tres tragos con vodka en el bar antes del fatal accidente. Rivero tenía alcohol y cocaína en su sistema, aunque sus niveles eran menores a los de Fernández.
El reporte también destacó que Fernández estaba molesto tras haber tenido una discusión con su novia, María Arias. Ella le escribió a Rivero en un mensaje de texto: "él ha estado bebiendo y no está en su mejor estado mental". "Solo necesito que cuides de él", le escribió en otro.
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