Miguel Sanó pensó en “suicidarse” tras la muerte de su hija

Freddy Ortiz Pujols

Santo Domingo

No todo es felicidad en la vida de un pelotero de Grandes Ligas. A Miguel Ángel Sanó le ha tocado vivir una dolorosa experiencia en su corta carrera como pelotero.

A sus 20 años sufrió la muerte de su hija, Angélica, quien nació  el 28 de noviembre de 2014, pero murió en el país cuando tenía una semana de vida tras padecer de un problema congénito del corazón.

Todavía el nativo de San Pedro de Macorís siente dolorosamente esa pérdida, la cual dijo no ha sido superada, que lo llevó a pensar  dejar el béisbol  y contemplar  el suicidio, hasta que sus familiares y un hombre que conocía de su nativo San Pedro de Macorís intervino.

"Yo estaba perdido en el mundo, y tenía esa tentación de dañarme a mí mismo", le dijo Sanó a Jorge L. Ortiz del USA Today. "El se sentó conmigo y me dijo 'cálmate, me dio un consejo positivo’”, agregó.

Ese entonces, se encontraba rehabilitándose de una cirugía en su codo derecho en los Estados Unidos y viajó a la República Dominicana para estar con su familia - incluyendo su miembro más reciente.

Cuando regresó a Fort Myers para reanudar su rehabilitación, su madre lo llamó para informarle de que Angélica había muerto. En ese mes de diciembre, se dibujó un tatuaje en su antebrazo derecho que dice "R.I.P. Angelica”.

Sanó dijo que fue capaz de ver a su hija, pero debido a las complicaciones de salud de la bebé, su esposa Daniela, nunca la vio.

"Sé que Dios tomó a mi bebé", dijo Sano. "Es una locura. Él me la dio. Luego la tomó de vuelta”, dijo Sanó según publicó Mike Berardino del  twincities.com en una entrevista a principios de mes.

Sano tiene un hijo de cinco meses llamado Dylan Miguel, pero aparentemente todavía "ve con tristeza las fotos de su hija, mientras que al mismo tiempo se recuerda a sí mismo mantenerse fuerte para su esposa, Daniela".

Él y Daniela están casados desde la primavera pasada y han estado juntos durante siete años. Todavía esperan volver a ser padres.

Ahora, a más de dos años de distancia de su tragedia familiar y de su cirugía , el jugador de 23 años está preparado para su primera temporada completa en la tercera base.