Nativo de Hato Mayor y jugando la posición de jardinero, Vilorio proviene de una familia deportista como relató quien lo inculcó a practicar este deporte fue su padre. El joven dijo antes de su firma que le prometió a Dios hacer una iglesia.
Relata que una de las cosas más difíciles que tuvo que pasar fue separado de su familia por un periodo de 8 meses en una academia de béisbol fuera de la ciudad cuando tenía 14 años. "Yo me quiero ir para mi casa, estos muchachos molestan mucho" expresó Vilorio que le decía en reiteradas ocasiones a su madre.
El joven deportista tuvo que hacer caso omiso a las criticas y malas influencias de personas que intentaban desenfocarlo de su objetivo que era firmar con un equipo de Grandes Ligas. Relata que tuvo ofertas de los Gigantes de San Francisco cuando tenía 15 años de edad, pero preferían esperar ser un pelotero maduro.
Expresó que nació en Villa Ortega en Hato Mayor y era un joven de barrio, que gracias al deporte pudo salir de las calles de ese sector y centrarse en el béisbol.
Indicó que hizo varios tryout durante dos semanas con los scout de varias organizaciones donde tuvo una excelente demostración de poder, velocidad y paciencia en el plato.
Según el portal de MLB en español: "Vilorio es un jardinero alto y con potencial de batear para poder e impactar el juego de diversas maneras". Puede batear para poder y contacto, y los Yankees esperan que su pueda desarrollar su cuerpo en los próximos años para convertirse en un verdadero slugger.
Los reportes de los scouts aseguran que Vilorio tiene las herramientas para consolidarse como un jardinero central, sin descartar que la evolución de su fisionomía y habilidades le hagan mudarse a las esquinas de las praderas.
Según el periodista Héctor Gómez, Vilorio se proyecta a estar en el roster de 40 de los Yankees en un par de años.
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